El regreso del Mellon Blue: un diamante legendario con herencia americana

Este otoño, el mundo de la alta joyería vuelve a posar su mirada sobre una gema que trasciende el tiempo y la moda. Se trata del Mellon Blue, un diamante azul de 9.51 quilates, talla pera, clasificado como fancy vivid blue e internamente impecable, considerado uno de los más importantes jamás presentados en subasta. Su próxima aparición tendrá lugar en Christie’s Ginebra, el 11 de noviembre, con una estimación que oscila entre los 20 y 30 millones de dólares.

 

 

Una historia de legado y sofisticación

El Mellon Blue no solo deslumbra por su color intenso y su pureza extraordinaria, sino también por su prestigioso origen. Su primera aparición pública ocurrió en 2014, cuando fue parte de la histórica venta de la colección de Rachel Lambert “Bunny” Mellon, recordada horticultora, filántropa, coleccionista de arte y musa de grandes diseñadores.

 

Bunny Mellon dejó una huella inconfundible en la cultura y el estilo: diseñó junto a su amiga Jacqueline Kennedy el icónico Jardín de Rosas de la Casa Blanca, inspiró a Jean Schlumberger en creaciones como el célebre “Bird on a Rock” y fue cliente asidua de Cristóbal Balenciaga, quien diseñó para ella trajes de jardín en azul. Su discreto pero refinado estilo la convirtió en una figura clave del lujo silencioso y de la elegancia americana más exclusiva

 

El diamante de una era

El Mellon Blue ya había captado la atención de la prensa en aquella subasta, cuando fue señalado por The New York Times por su rareza y el valor que alcanzaría, superando las expectativas de la casa de subastas. Se cree que originalmente formaba parte de un par de pendientes de diamantes azules, una rareza dentro de una rareza.

Hoy, su retorno no podría ser más oportuno. En un mercado donde la provenance —el linaje de las joyas— cobra un valor tan importante como la gema misma, este diamante encarna no solo la perfección mineral, sino también una narrativa cultural ligada a una de las mujeres más influyentes del siglo XX.

 

La piedra imposible de ignorar

Rahul Kadakia, director internacional de joyería de Christie’s, lo resume con precisión: “Su forma perfectamente simétrica y su tono ricamente saturado entregan un brillo extraordinario. El Mellon Blue es un diamante para su tiempo”.

Y aunque Bunny Mellon defendía la idea de que “nada debería ser notado”, resulta imposible no rendirse ante la magnitud de esta piedra, que vuelve a recordarnos que la verdadera joyería es aquella que combina excelencia estética, historia y legado.